Ese dolor agudo que te estruja en pedazos el alma es germen lluvioso de lágrimas que te acompañan cada mañana. Esa angustia adherida que te resquebraja las entrañas es acompañante anónimo que te castiga siendo aliada...
A veces los adultos sin querer dejamos que el corazón se contamine entonces la cabeza se envenena y la boca dice cosas terribles. Cosas que hacen daño y castigan a otros corazones inocentes, los niños nos enseñan a limpiarlo preguntando ¿por qué me hieres?...
De un día para otro todo cambia alrededor, los amigos van primero lo demás pierde valor. Primeros escalofríos que erizan la piel al sentir unos latidos y unos labios de miel. Imaginación desbordada marca ilusión activada dando poder absoluto sobre la vida empezada...