La estación del tren

Hay días que por fin te decidirías a hacer eso que tanto tiempo llevas pensando . Has reunido las fuerzas necesarias para dar el paso y alcanzar esa meta tan deseada . No sabes si los astros te son favorables o no pero tienes claro que es ahora o nunca . Tienes que embarcarte en ese proyecto que siempre estuvo en tu cabeza , ahora puede hacerse realidad .
Salgo a la calle y comienzo a caminar absorta en mis pensamientos , mi decisión es firme , lo conseguiré . Un miedo me asalta , sé que no será fácil la decisión final pero esta vez no me echaré atrás . Me tiemblan las rodillas , mi corazón se acelera , ya veo la estación del tren . Al acceder al andén un sudor frío acompaña las palpitaciones que comienzo a sentir . A mi recuerdo vuelven aquellos intentos pasados en los que la tensión final me hizo volver a casa , pero esta vez , lo conseguiré . Camino hacia el despacho de billetes y observo a una pareja comprando sus tickets , es una antigua estación que perdió los barnices de sus tablas con el tiempo . Salgo afuera y contemplo como el jefe de estación prepara su silbato , el tren está llegando . Que momento más emocionante , finalmente lo voy a hacer . Acelero el paso siempre mirando mi objetivo , controlando las distancias . ¡Oh! ... el ferroviario se acerca , se me va a anticipar , ¡no! , esta vez no . Doy un salto y me planto frente a la puerta , he llegado antes , lo conseguí ... y por fin , toco la campana .